Refrescante sabor asturiano “al orbayu”
C/ Jorge Juan, 16
28001 Madrid
Tfno: 91 431 59 50
Pasear por el barrio de Salamanca y no encontrar el Paraguas es prácticamente imposible, ya que es uno de los locales que mayor repercusión han tenido desde su inicio hace 7 años.
Un lugar para ver y ser vistos con una terraza amplia, un par de amplios comedores y varios reservados crean un ambiente selecto en el corazón de Madrid.
Han sido galardonados por los “ Premios La Cazuela” como la mejor innovación en cocina 2010, y con el mismo entusiasmo han abierto un bistrot Ten Con Ten en la calle Ayala, 6.
Sandro Silva y Marta Seco llevan un trocito de Asturias a Madrid con gran ilusión con su base en lo tradicional con un toque creativo, donde no pueden faltar las fabes con centollo y almejas, arroz con pitu de caleya negro con berberechos, las zamburiñas, los chipirones a la sartén, calamares en su tinta, calderetas de pescado, así como gran variedad de carnes y pescados.
Hay posibilidad de pedir medias raciones, aunque en realidad no son del todo abundantes, la decoración en tonos ocres y marrones, con cocina vista y un comedor separado en varias estancias, mantelería de lino y luz tenue y agradable.
En su bodega descansan más de 100 referencias de vinos, cavas y champagnes de todas las procedencias y precios que algunos llegan a alcanzar las cuatro cifras, además de medias botellas y carta de aguas.
Como detalle de la casa, la mousse de queso cabrales y selección poco variada de panes, y comenzamos con el tartar de atún y salmón con un ligero toque dulce, las alcachofas con puré de patata muy recomendables, la ensalada de tomate, los rollitos de carabineros, las patatinas con trufa y huevo como entrantes rociado con cava Juvé y Camps y posteriormente la lasagna de centollo exquisita, el solomillo a la mostaza, el tradicional arroz con pitu de caleya en este caso negro, las colas de cigalas y las fabes con centollo presentadas en una pota de hierro, ideales para compartir maridado con Matarromera Reserva 2001, elegante esqueleto de taninos dulces que aunan cuerpo y elegancia, bien conjuntados con una medida acidez.
En esta ocasión la velada se prolongó y el apetito también, ya que fue una grata y fantástica sorpresa reunirme con grandes amigos de mi infancia, así que no podían faltar los postres: la crema de arroz con leche, la crema de yogurt con helado y la mousse de higos, además de las suculentas tejas de almendra que ofrece la casa y nuestros respectivos cafés.
El servicio es mejorable, ya que anteriormente Sandro se acercaba a las mesas a compartir opiniones, pero deben estar un poco desbordados y considero los precios son un poco elevados; pero si queréis cenar ahí es indispensable reservar, ya que casi a diario es imposible encontrar sitio. No obstante, el mejor restaurante asturiano en Madrid hoy en día.
Precio medio entre 75 y 85 euros
Indispensable reservar
Terraza y 2 comedores
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